miércoles, enero 24, 2018

Parte uno

Tuviera la oportunidad de encontrarte en silencio, haríamos de la noche una revolución, ya sea por las ganas urgentes que nos deja la ausencia y sus consecuencias.

Tuviera la suerte de llegar a ti a media noche, o medio día, ¡qué importa que el mundo se vuelva loco! Sólo importa sostener tu respiración.

Tuviera la oportunidad de regalarte suspiros, te dejaría llevarte hasta mi aliento, sin olvidar, claro, el afecto y tacto correspondido.


Tuviera la oportunidad de llegar hasta tu piel a través de la mía, haría de ellas una geografía completa donde ambos danzaríamos con la luna sin maldito reparo... con afecto, tacto y con pasión...

miércoles, enero 17, 2018

Urgencia

El aire se detiene mientras se estrella con mi espalda, mi rostro y toda mi desnudez; de mis manos brotan las ganas de tenerte, sentirte, siquiera tocarte pero sólo está tu ausencia.
El tiempo se detiene cuando vagas en mis pensamientos, cuando encuentras consuelo en mis brazos aunque ahora se limite dentro de mi mente, más no fuera de ella.

Sucede la distancia eterna que agujera mis sentidos, que lastima mi piel y mis párpados; sucede la distancia que impacienta y me deja urgente de ti.

Te busco a medio día, a media noche y en todas partes.
Te busco en silencio mientras la noche y el desvelo me consumen.
Te busco a tientas y con el alma pero sólo te encuentro en recuerdos, entonces, mi respiración se detiene.
Te busco en el abandono y los tintes corazón de aroma dulce.
Te encuentro, te pienso y siento.

Tus manos y tus caderas detienen al mundo, tu cuerpo y alma son quienes buscan mi cercanía.

Urgencias son las que escurren por mis brazos, urgencias de ti y tus labios;
urgencias de venir a colapsar;
urgencias de la reciprocidad;
urgencias de tu entrepierna; urgencia de ti.

Urgencias y más callo con el canto que de mis ojos brota;
urgencia de tu mirar...