martes, enero 19, 2021

De los momentos y recuerdos

Hace tan poco que el invierno nos ha alcanzado
aunque las remanencias de la nostalgia y la melancolía nocturna
parecieran haber alejado su comienzo,
desde las frías cosquillas que rodean la piel de mi nariz,
hasta el desconsuelo que sucede tras baja la temperatura.
En mi cabeza resuenan los ecos de melodías propuestas
a razón del sabor de los recuerdos y momentos,
esa evocación generada a causa del consuelo y la calidez de un abrazo,
una caricia, un solaz al alma.
Las palabas que fluyen a raudales a través de mis dedos,
llevan las flores moradas que alguna vez encontramos bajo mi piel,
estas buscan florecer como llanto, como canto,
como todo lo que recuerde un bello atardecer.
Hace tanto que se me detuvo el tiempo,
desde aquella vez donde las manecillas azules pretendieron mesurarlo en un reloj roto,
hasta el choque de copas y el vino acariciándonos los labios;
con estruendos y vuelcos al corazón
el tiempo vuelve bajo suspiros que componen la noche.

Hace tanto y tan poco que comenzamos a componer nuestras noches y alegrías, 
nuestros momentos y recuerdos antes del amanecer,
en mi cabeza resuenan las armonías afinadas a la caricia fría de la luna
en mi cabeza resuena el sonido del viento, el murmullo del sueño eterno
ya no hay más.