jueves, febrero 09, 2023

Emociones perdidas

Suelo pensar para mis adentros sobre las viejas razones perdidas debajo de la cama, ocultas entre los párpados.

Sobre el sesgo que se encuentra fecundando el centro del universo, esperando para florecer al filo de la media noche. 

Sobre la ironía y el desdén hastiados de altanería y uno que otro halago arrogante. 


Suelo pensar sobre las historias paralelas que se pierden cuánticamente.

Sobre los atisbos de realidad remanentes al amanecer, esos mismos que suceden mientras, y con manos somnolientas, retiras la flojera del rostro.

Sobre las reminiscencias que fluyen a través del oído, el tacto y todos los sentidos.


Solía pensar sobre las dos razones estipuladas en cada ida y venida, en casa vaivén inmiscuido a través de la respiración.

Sobre los sentimientos que se postran sobre luz de luna y raudales de añoranzas perdidas.

Sobre el desdén a la ironía fluyendo a través de los poros.


Solía pensar en girares inmaculados envueltos en desdén y abandono, en fantasías arrastradas por el sol, la luna y las estrellas.

Sobre desvelos envueltos en cornisas y balcones donde se añora el universo de más allá.

Sobre la danza etérea que se postró ante mí y mi consuelo, ante mis sentidos y mi respiración.


Si he de pensar en razones e historias, lo haré vinculando la utopía con la realidad, el abandono con la vida, la realidad y el universo; habría de hacerlo a ojos cerrados y con el corazón en las manos, sería en un minuto y dos… y tres… sería con la marca de nacimiento escurriendo desde mi frente hasta mi coleto; acariciando mi tacto y sazón… arrastrando deseo, obsesión y alguna que otra fascinación.