lunes, mayo 25, 2015

Duermevela

Duermevela digo a cada instante con los párpados pesados como plomos, con el tránsito de mis venas irrigado de ácido. Duermevela... 
Injustamente estoy juzgando sin mirar, sin conocer de manera completa la situación pero es inevitable no querer mirar hacia el "cielo" y querer escupir y destruir todo lo que se acumula a lo alto. Sé que no tengo las palabras adecuadas para justificar semejante aberración pero también sé que la jodida omnipresencia que se jacta de la eternidad y perpetuidad está provocando algo en mí, más de lo que es capaz de soportar. Me pregunto si tienes miedos también o si tienes sueños y jodidas esperanzas. Duermevela...

Duermevela tatuado en mis retinas mientras pasan las horas en las que no concilio ficción ni realidad. Pienso de nuevo "Llévame", no importa si es un sitio lindo y afable o uno pusilánime lleno de malicia, sólo llévame de una buena vez. Me importa un reverendo ardite si es el momento indicado para el "sagrado" descanso. Duermevela repito para mis adentros mientras pretendo caminar sin necesidad de observar el rededor, mientras me sigo consumiendo en la misma atmósfera a la cual me he estado destinando con el pasar del tiempo y el espacio. Duermevela...

Duermevela de una buena vez, antes de que sea demasiado tarde para ello. Callando más de lo que debería con tan sólo un dedo o un suspiro en él. Ahora veo las situaciones con diferentes perspectivas, desde las más inmaculadas hasta las más desesperadas, con el hálito que está transitando su columna vertebral y demás. Duermevela repito y repito mientras veo como ahora quien se consume de una manera diferente es alguien más, mientras remarco las viejas heridas de bondad que están plasmadas sobre mi espalda y mis rodillas, sobre mi piel y mi cuello y mis brazos y cada una de mis extremidades. Duermevela...

Duermevela pensando en la injusticia divina que ahora está mermando y volviendo mi estabilidad en un mórbido chiste sin gracia y sin ironía. Estoy recordando el gran sueño que se convirtió en realidad y en el océano fugaz que cargamos sobre los hombros, justo donde se rige el centro del universo. Ojalá estuvieras aquí y ahora para sujetar mi mano mientras me estoy lamentando la mala jugada que el destino pone delante de mí, pero de nuevo te tengo y no. Duermevela junto a la esperanza que estaba gestándose en el vientre del universo. Duermevela cariño mío que no habrá descanso después. Duermevela...

sábado, mayo 23, 2015

Impío//Memorial

Hoy que veo tu cuerpo recostado junto al mío que no es más sabio,
impío o inmaculado, voy a tocarte y sentirte como la ráfaga y brisa,
a soñarte e imaginarte como las solemnes proezas de nuestra velada,
a saborearte y desazonarte con una simple caricia.

Hoy que veo tu manos entrelazadas a las mías que no son más valerosas,
frágiles o cariñosas, voy a pensarte y dibujarte no sólo con la mirada,
a cantarte y tal vez divulgarte como las palabras amarradas a las melodías,
a pertenecerte y persuadirte aunque sea por tan sólo un instante.

Hoy que siento tus labios húmedos sobre los míos que no son más sagrados,
dulces o arrebatados, voy a sobrellevarte y declararte con impulsos,
a palparte y degustarte con la mirada y la bella sonrisa,
a escucharte y profanarte con palmas abiertas y el alma de frente.

//

Ahora que no veo tu cuerpo o tus manos a mi lado o entrelazados a mis sentidos,
que no siento tus labios retrasando mi respiración sobre los míos que ahora están secos,
sé que debo tocarte, sentirte, soñarte, imaginarte, saborearte, desazonarte,
pensarte, dibujarte, cantarte, divulgarte, pertenecerte, persuadirte,
sobrellevarte, declararte, palparte, degustarte, escucharte y profanarte.

Sé que debo amarte, amor mío, sé que debo amarte y procurarte,
aunque la luna nos mire a ojos abiertos sin regresiones ni remordimientos.
Sé que debo amarte amor mío, sé que debo amarte y procurarte,
aunque aún no esté escrito y en nuestros corazones todavía haya lamentos.

domingo, mayo 17, 2015

Sin Título

Estoy viviendo con sonidos abiertos
sintiendo y refiriendo cada uno de ellos a tu recuerdo,
a la calidez fría de tus palmas sobre las mías
a los latidos palpables en tu respiración.
Tengo todo de ti, asunción de ti,
y más importante aún, ausencia de ti,
ausencia de ti y tus caricias y tu sonrisa
que es a mí la vida misma.
¿Quién iba a pensar que serías de mí?
que serías de mis pensamientos
aquél que recorre mi universo,
quién lo iba a pensar.
Ahora me encuentro aquí, queriendo,
soñando, imaginando cada instante,
cada momento que no compartimos
pero que he creado en mi mente.
Y de nuevo es que te pienso y digo para mis adentros
"Te quiero" sin remordimientos y veo nuevamente
tus labios proclamar nuestra victoria, juntos,
aunque de nuevo te tenga y no.

viernes, mayo 15, 2015

Distopía

No tengo certeza alguna de tantas cosas, desde las más elementales e inminentes, hasta aquellas jactanciosas que se convierten en momentos de gloria afable. Encontré a un costado mío uno de tus recuerdos, ¿qué sucede conmigo? De entre las certezas que se han escapado se encuentra el no saber en qué me he convertido y a qué me he condenado. Quisiera poder hablar más de ti y de mí no sólo como enajenación o simple gusto, sino, por digna pasión y melancolía, y a estas malas ansias se han unido los sonidos del ambiente en el cual, y al menos por un instante, nos consumimos juntos.

He creado una fuerte contradicción en estas letras. El propósito de lo ecléctico siempre es y será una buena motivación para encandilar las situaciones y las emociones a torrentes, para desenfrenar cualquier cosa que está relacionada con la pasión, que no es ambigua ni ortodoxa.

Estoy derramando recuerdos a través de los párpados una y otra y otra vez, lo sé, más aún, también sé cuál ha sido la razón, y no lo digo por justificación a mis causas ni por difamación de consecuencias. Va más allá de esto. Cierro mis ojos con parsimonia y me hundo de nuevo en la calidez de tu piel y la suavidad de tus muslos, estremezco tus impulsos con la caricia sobre tu espalda. Mis dedos sólo una extensión más de tu cuerpo.

domingo, mayo 10, 2015

Varðeldur

Estoy delante de la hoja en blanco, te miro a ti y a mí de la misma manera en la que lo he hecho a lo largo de tanto tiempo, sin ser parte el uno del otro. Aún no comprendo cuál es el verdadero contexto que está en tu/mi cabeza, así como no lo has hecho tú, por algo somos tan semejantes. Recalco en mis pensamientos las últimas noches, esas que han transcurrido en vela y sin una buena razón, esas noches en la que ha estado alguien presente, mucho más de lo que habría querido, y no lo digo por ser tan mezquino, lo digo porque quizá jamás encontré la manera de procrear paz...

Ya no me basta con verte y mirarte sólo en mis pensamientos, me he movido de entre los escombros que van quedando con el paso del tiempo sólo con la idea de por fin no perderte fuera de mi mente, más ahora, sé que las ideas y conjeturas que estoy derrochando a través de cada respiro quedarán de nuevo en el ático de mis pensamientos, en las cajas de zapatos bajo la cama y en los recuerdos que cargo en los bolsillos rotos de mis pantalones.

Estoy desenmarañando todo lo que cargo sobre los hombros, tengo las imágenes que se repiten una y otra vez, esas mismas que están llenas de recuerdos que jamás sucedieron pero son tan tangibles y latentes, tan vívidos, tan certeros. Dentro de cada uno de estos se puede percibir hasta la sinfonía más tenue de tu aroma que escurre sobre tu cuello, que desemboca en los ríos de tu espalda. Puedo sentir la manera en la que palpas con los ojos cerrados las constelaciones que se postran en mi espalda y cada centímetro de mi piel. No tengo problema alguno en querer ser de ti más que el simple recuerdo al amanecer.

Entonces es que yo también cierro los ojos sólo para sentir tu cercanía infinita, el invierno que circula sobre todo tu ser, la primavera negra que guardas en tus párpados, la Venus que se acaricia con la conjunción que entrepiernas llevas y el canto al Ecuador que proclamamos juntos al menos por un instante.

lunes, mayo 04, 2015

Crónicas de la muerte y el amor

Lo que pretendo referir a continuación es tan sólo el origen de una nueva vida e historia que ha de basarse en las únicas verdades de la vida: la muerte y el amor. He dicho pretendo porque no estoy seguro de lograrlo, es bien sabido que pocos son quiénes han hecho semejante logro de manera uniforme. Durante la mayor parte de la vida la pasamos muertos. Basta tan sólo con cerrar los ojos y pensar en la impune inmundicia que está rodeando a cada uno de nosotros, lamentable. Quisiera tener más que escribir que esta mala monserga pero no es así, al menos lo hago sin vacilar y con la idea para mis adentros de que al menos podría fastidiar a alguien de lo lindo con esta linda irreverencia. Inmaculado.//

Siempre he notado una rara fascinación (enfermedad y/u obsesión) por martirizarme con ciertas situaciones. La volatilidad de mis emociones es la mejor espectadora que he tenido en cada acontecimiento. He escrito tantas cosas como el "Illuminate my heart, my darling!" ha marcado cada uno de mis poros con melancolía atónita. Miro hacia dentro de mí y puedo consagrar las ideas que jamás podré sostener en manos, o peor aún, que no podré llevar a la realidad y relaciono todo esto con quien ha dicho que somos el uno del otro alguna vez, quizá sí tenga un nombre dentro pero habrá muchos más que puedan sentirse identificados ciertamente. No tengo certeza de lo que hago porque he comenzado a dudar de mi propia existencia y a creer que en algún momento sufrí alguna fisura que se ha convertido en más que un derrame de ríos y volcanes aborronados a raudales a través de cualquier ventana. Ahora, mi cuerpo está suspendido en una atmósfera emergente que se consume no sólo en cenizas, también en polvo y micropartículas que son arrastradas por el viento hacia ningún lugar. He desparecido dentro de mí mismo y quizá lo estoy haciendo por propia convicción.

//Ya no importa realmente el origen del contexto, de la idealidad o la dualidad de cada perspectiva que tenemos. Me parece incongruente la rara mescolanza que está latente desde hace algo de tiempo, quisiera desmenuzar sin dudar, sin titubear y con un gusto bien venido hacia la incertidumbre de ello. Aborrezco enormemente a cada una de las bandas pop que están saliendo debajo de las coladeras, me entristece y encabrita hasta las entrañas la simple idea de creer en el amor que no sostiene la verdadera pasión, que sólo se ejerce como la masturbación etérea para el alma, y que ahora, se ha convertido en la parte primordial de la vida.

Es por esto mismo que estoy relacionando al amor con la muerte, puesto que ambas están en función de la vida, ambas son intangibles ante la realidad pero no ante la idealidad. Quizá una abarca más sensaciones gustosas pero, lamentablemente, las restantes son más fuertes e impulsivas que las demás. Estoy amarrando los escrúpulos que se crearon a lo largo de la historia del hombre porque no son más que una gran bocanada de mierda en los labios de Dios.//

Por dicha razón estoy escribiendo una carta de despedida, una carta donde no reniegue todo lo que tengo o todo lo que soy. Será algo más que eso, estaré describiendo quizá los contrastes de mi vida donde desvelaré mis recuerdos, desde lo más fugaz hasta lo más locuaz, da igual. Empiezo entonces diciendo que lamento no poder pretender ser lo que han tratado de inculcarme, haberme rebelado contra la ambición que los demás tenían hacia mi vida. Termino recalcando el adiós que estuvo a cada instante saboreando mis labios, amancillando una rara y efímera manera de subsistir con convicción errónea.
Lamento todo lo anterior pero ahora qué más da, no he podido ni podré arrancarme la sensación en el palpitar o en el pecho que quedó desde aquella última vez en la que fuimos uno mismo delante del mar...

domingo, mayo 03, 2015

Ausencia de ti

Me pregunto cómo se supone que uno toma el rol en cada situación, sea por mera pesadumbre o por invicta glorificación. He almacenado en mí un sinfín de sensaciones de ti, tengo hambre de ti, sed de ti, ganas de ti. Tengo tanto de ti, incluyendo tu ausencia. Busco la frecuencia correcta por mera fascinación, por enajenación, me resulta vigorizante como un tónico a media noche, como un trago amargo de amor y vino durante la primavera negra. Mi sorpresa se ha vuelto mayor, ha confabulado en mi contra resaltando y embarrando y atiborrando cada una de las blasfemias que estoy arañando sobre mi piel con una simple vocal, y no lo digo como manera de reclamo para mi mermado subconsciente, no qué bah, es simple y sencilla mala melancolía.

Te busco y te encuentro a cada instante, tus imágenes escurren por mi piel, extraño la mejor de todas tus imágenes. Lo escribo y tatúo en mi piel y mis retinas, no queda más que sólo grabar de alguna manera perpetua el recuerdo tuyo que no sostengo y no comprendo. Estoy consagrando las ideas que tengo acumuladas desde que nací, desde que grité por primera vez el desprecio por el mundo entero, mis pensamientos aún llenos de líquido amniótico palpitaban de coraje y resentimiento "Jamás he pedido venir.". Y por semejante razón es que quiero demostrar aquello que callo durante mis ratos de ocio y silencio, quiero callar cada uno de los silencios que han profanado y perturbado mis pensamientos, quiero simplemente callar cada uno de mis silencios con los tuyos.

No hay más que pueda deslumbrar entre líneas a través de todo este escrito. En algún momento ha de llegar ante ti quizá de la manera menos esperada y sé que llenará de mescolanza palpable cada uno de tus sentidos y tus impulsos. Pienso para mis adentros qué tan benéfico y malicioso será todo este océano de palabras que construimos como puente indestructible. Me basta con que saber soy de ti al menos cinco minutos al día, que me adueño de tus pensamientos, tus deseos y tus sensaciones. Me basta con saber que de alguna manera sin un motivo o pretexto transite tu imaginación.

Ahora he resuelto un mundo entero nuevamente y lo haría una infinidad de veces, de manera omnímoda y sin un libro de instrucciones, sin una verdadera forma en específico. He escrito tantas veces tu nombre dentro, y aquí y ahora, te llevo marcada en cada centímetro de mi piel. Quiero enseñarte a aprender a corresponder sin regresiones ni lamentos, sin remordimientos, y yo, quiero leer tu piel a través de mi tacto etéreo, así por fin ambos nos recordaremos.

viernes, mayo 01, 2015

Perspicaz

La elocuencia con la que se narran historias en la actualidad me crea una rara sensación de desgana, se derrumbó la verdadera leyenda de una antigua ciudad que ahora sólo está llena de infames. Precisaba para mis adentros cierta epifanía que reveló ante mí un sinfin de recuerdos, recuerdos en los cuales me vi inmiscuido durante mi infancia "inocente". Hubo cieta vez en la que descifré más de lo que debía, a tal grado, que pareciera humillé a mi superior. Sin siquiera saber cuál había sido mi crimen, porque cabe mencionar que hasta ahora descubro que lo cometí, resultó una escena humillante en la cual insultaron a lo que los demás llaman "inteligencia".

No conozco el motivo o razón para dicha declaración en la cual destruyeron mis pensamientos. Para mi suerte, los escombros quedaron ahí y ahora, mientras pienso para mis adentros esta mala jornada llena de melancolías, es que los reestructuro, estoy creando grandes monumentos donde esclarecezco mis pensamientos. Pretendo crear algo inconmensurable, omnímodo.

Una vez hecho y dicho todo lo anterior, buscaré a mi nuevo inferior y declinaré delante de su rostro "Tenía razón, no soy inteligente, sólo soy perspicaz.".