viernes, abril 13, 2012

Nada

Te pido más aún de lo que en verdad eres capaz de conocer. Entonces muéstrame los límites, el eje que rige tu cabeza. Conoceré cada trópico cual meridiano que has marcado en tu vida. No hay mejor manera de fraccionar al mundo. Comprendo el porvenir de nada y más aún estoy marcado como un reloj esperando la hora perfecta. Sucederá de nuevo pronto. No habrá respeto, no habrá regresiones. No más retribuciones.

Esa manera de marcarme siempre exige y crea confusión. Amén he dicho quiero vivir enredado un buen tiempo. Deberás entender eso de una buena vez. No veo el tiempo correcto y menos tengo una noción del mundo perceptible. Vivo y viviré lo más vivaz que pueda haber. Reajustaré y quedaremos exhaustos. Y cuando todo esto se vuelva parte de la realidad que no comprendes y que yo exagero con mis adulaciones insignificantes, entonces será que daremos vuelta a la página para comenzar a escribir de nuevo en cero. 

No hay comentarios.:

Publicar un comentario