He de confesar que muero un poco
cuando pienso en ti,
y habría de hacerlo al amanecer
y al anochcer,
al son de la vida y la muerte
que te he declarado.
He de confesar que no sólo pienso
y me pierdo en ti,
tendría que hacerte saber cada idea
y pensamiento articulándonse en mí,
tendría que llenarte de pasión
y agonía, de mis delirios.
He de confesar que pienso en el momento
en el que he de probarte,
el mismo en el que seas de mí
y en el que te tenga más,
el mismo en el que respondes
con una sonrisa "sí y sólo sí".
He de confesar que de morir a razón de ti,
preferiría hacerlo en tus labios,
preferiría desaparecer al ritmo
de tus latidos y tu respiración,
preferiría morir en tu nombre
arraigado a tu presencia.
He de confesar que justo ahora,
que de nuevo te tengo y no,
que pienso y me pierdo en ti,
que mis latidos se detienen,
que mis suspiros te pertenecen,
vivo y muero una vez más...
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